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Leishmaniosis en perros, cómo reconocerla

Publicado en Blog
leishmaniosis en perros

La leishmaniosis en perros es bastante frecuente (afecta al 15% de los canes en España, cifra que se eleva al 70% en zonas como Andalucía y la Comunidad Valenciana) y grave. De hecho, puede llegar a producir la muerte de tu mascota si no se trata adecuadamente.

Esta enfermedad está causada por el parásito Leishmania infantum, que infecta al perro por la picadura del flebotomo. Un insecto que se activa con temperaturas más elevadas y que antes de contagiar a nuestro perro ha tenido que picar previamente a otro perro enfermo.

La leishmaniosis en perros es una enfermedad endémica en zonas como Andalucía o la Comunidad Valenciana. En otras, de clima más frío, repunta en los meses de primavera y verano en los que suben las temperaturas.

Una vez infectado, el sistema inmunitario de nuestra mascota detecta la presencia del parásito en la sangre y empieza atacarle para destruirlo.

Síntomas de la leishmaniosis en perros

  • Alteraciones en el pelaje (pérdida de pelo alrededor de ojos, orejas y nariz)
  • Lesiones en la piel y en los ojos (lagrimeo, párpados inflamados)
  • Problemas renales
  • Decaimiento, apatía
  • Pérdida de peso sin motivo aparente
  • Lesiones articulares y atrofia muscular
  • Problemas digestivos
  • Hemorragia nasal
  • Ganglios inflamados
  • Crecimiento desproporcionado de las uñas

Es muy importante acudir al veterinario ante la presencia de uno o varios de estos síntomas. El diagnóstico precoz de la leishmaniosis es fundamental para evitar que la infección se extienda y los daños sean mayores.

Otra cuestión a tener en cuenta es que entre el momento en que se produce el contagio a través de la picadura y las primeras manifestaciones de los síntomas pueden pasar entre 4 y 6 meses.

Podéis ampliar la información sobre la leishmaniosis y aclarar falsos mitos en torno a la enfermedad en este artículo de nuestro blog.

Prevención de la leishmaniosis en perros

La enfermedad no tiene cura, por lo que su tratamiento se limita a intentar frenar los daños. Por ello, la prevención es esencial y está dirigida a evitar la picadura del flebotomo.

Os damos algunas recomendaciones:

  • Evita las salidas con tu perro al amanecer y al anochecer, son las horas en las que el flebotomo está más activo.
  • Utiliza mosquiteras en casa y evita que tu perro duerma al aire libre
  • Si vives en una de las zonas endémicas, se recomienda realizar tests serológicos periódicos (cada seis meses) a tu mascota para la detección temprana la enfermedad. Sigue el calendario vacunal y las visitas regulares al veterinario.
  • Usa productos repelentes específicos para evitar la picadura del flebotomo, tanto sobre tu propia mascota (collar antiparasitario, pipetas antiparasitarias, spray repelente, etc.) como sobre su entorno (cama, zona en la que descansa, etc.).

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